¡Y además se mueven!

Cuando los hermanos Lumière inventaron el cinematógrafo a la gente le pareció una cosa infernal, aparte de poco útil, condenada al fracaso. ¿Qué interés tenía ver un montón de imágenes en movimiento? y más aún, eso ¿podría considerarse arte?

Más de un siglo después de su invención podemos decir que el cine es un arte, pero ¿podríamos decir lo mismo de su aplicación a la ciencia? Atendiendo a los Premios del Nikon Small World in Motion del pasado año (2013) sí.

Aquí os traigo los vídeos premiados para que juzguéis por vosotros mismos.

El primer premio fue para el Dr Gabriel Martins del Instituto Gulbenkian de Lisboa por este video que muestra la anatomía de un pollo de codorniz de 10 días que mide unos 23mm. Dentro del huevo. La reconstrucción tridimensional comprende unas 1000 imágenes independientes.

El segundo premio va para Michael Weber, del Max-Planck-Institute of molecular cell biology en Dresden. En este video se puede observar el corazón latiendo de un embrión de pez cebra, uno de los modelos de experimentación más comunes. El tamaño de este corazón es el equivalente al diámetro de un cabello humano, unas 250 micras. En rojo y en movimiento también, pueden apreciarse los glóbulos rojos de la sangre al ser bombeados por el corazón.

Y por último el tercer premio, para el/la doctora Lin Shao (a mi me parece nombre de mujer pero no lo tengo claro) del Howard Hughes Medical Institute (Virginia, USA). Este es el premio a la menor estructura y es que lo que vemos es una mitocondria (compartimento subcelular dedicado a la producción de energía) de una célula HeLa viva. La célula está marcada con una molécula fluorescente verde y la manera de conseguir la suficiente resolución para componer este video es usar una técnica de microscopía llamada SIM (structured illumination microscopy)

Espero que en este punto ya podáis estar de acuerdo conmigo en que si estas imágenes en movimiento aún no son arte desde luego, poco les falta. Y en el camino aquí estaremos observando cómo madura el campo, al igual que en el cine se pasó del cinemascope, al cine mudo y en fin al cine sonoro, en color  y por fin, en 3D. El futuro está aquí y da gusto mirarlo.

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