Vacía y plena

Tengo el blog abandonado. Al menos las secciones en español, y tengo que pediros disculpas por ello, pero los últimos meses han sido movidos. Muchos cambios vitales y poco tiempo para dedicarle a escribir. Además, profesionalmente digamos que me encuentro en un staccato, en parte debido también a esos cambios vitales a los que me refería antes.

Es curioso hasta que punto nos define el trabajo como individuos. Es cierto que hay personas que ya se sienten plenas y satisfechas una vez han cumplido su rol biológico, y les basta con definirse como progenitores. Yo tengo la sensación de que nunca perteneceré a ese grupo. Por breves que hayan sido los periodos en los que por fuerza o por necesidad he dejado de estar activa profesionalmente he sentido siempre la falta de algo. Como si una parte de mí se sintiera insatisfecha, falta de realización personal. Por otro lado, es curioso que hasta ahora no he sentido tampoco nunca que mi ocupación profesional me llenara tanto que no necesitara más. No creo que el trabajo, sea cual sea el que haya hecho hasta ahora, me haya dado la felicidad, pero a falta de esa rutina, de esa responsabilidad, me siento vacía. Inútil, hasta cierto punto. Es como si a mi hambrienta neurona le supiesen a poco los desafíos de la vida diaria y precisara de algo más, una fuente de ejercicio, un reto…o varios. Quizá por eso soy tan aficionada al teletrabajo, o por eso aun sin necesidad busco ocuparme los días aprendiendo cosas nuevas y/o poniendo en práctica otras que hace tiempo tengo abandonadas…

En fin, que no se hasta cuándo no estaré de nuevo activa en la blogosfera, pero una cosa está clara: volveré, porque no puedo vivir sin esta ventana abierta al mundo.

¡¡Feliz verano!!

2 thoughts on “Vacía y plena

    1. Muchas gracias por tu comentario. Hacía tiempo que sentía que escribía para mí sola…bueno saber que aún hay quién me escuche/lea.
      Gracias

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