Cuentas de septiembre

Se acaba septiembre, y sólo puedo decir: ¡por fin!

Ha sido un mes bastante agobiante, con dos semanas seguidas de viajes de trabajo, tratando con clientes, y como siempre, en esta tercera lengua que empieza a convertirse en la primera aunque sea sólo por el número de horas al día que dedico a hablarla…

En cualquier caso, como todos los septiembres, que para eso es el inicio del curso escolar, toca hacer repaso a lo que conseguimos en el año que termina. Y creo que este año no puedo quejarme, al menos en lo profesional. Hace un año andaba más perdida que espinete en Barrio Sésamo, sin tener ni idea de adónde enfocar mi vida profesional, ni de dónde hacerlo. Tanto fue así que me puse a hacer un curso tras otro, que si project management, que si scientific management…y entre medias de viaje en la otra punta del mundo, mandé el currículo que me pondría donde ahora estoy.

En los nueve meses que llevo aquí, mi alemán, a fuerza de horas, ha pasado de ser ramplonero a rozar el C1 (aunque las declinaciones y el tuteo/hablar de usted sigan resistiéndome), he escrito innumerables artículos que de hecho ya están aceptados y publicados, incluído mi primer comentario como primera autora en un campo que hasta hace poco era absolutamente nuevo para mi, los ensayos clínicos, y he coordinado projectos educativos con más de 100 neurólogos durante sus asistencia a congresos internacionales. Además, me lo he pasado pipa montando páginas web, y ayudando a organizar un congreso que empieza a parecerse al Escorial, de lo mucho que nos está llevando.

He tenido que superar la pérdida de mi cicerone en la empresa a la misma puta enfermedad que sucumbió mi padre, y aún encontrar las ganas para dejar el pabellón alto por los dos, y creo que no lo he hecho mal.

Por un lado me faltan las fuerzas, pero por otro me sobran las ganas: quiero aprender a programar páginas web,  quiero conseguir y tener mis propios clientes, desarrollar nuestra cartera de productos…vaya, que si me dejan me hago con la empresa 😛

Además, aunque no me explaye por aquí, ando colaborando con algunos proyectos divulgativos que me tienen enganchada, entre otras cosas, porque valoran mi aportación con el vil metal, y mientras no llegue fin de año y mi tan esperada y merecida subida de sueldo y/o bonus, mi escaso tiempo libre frente al ordenador está en venta.

Para leerme más, y leerme en mi salsa: la científica, tendréis que pasaros por mappingignorance.org, o por mi añorado naukas.com, porque mi más querido nuevo projecto por desgracia aún no está online. Pero os prometo que tan pronto como esté en abierto podréis leerme…eso si, en inglés esta vez, y hablando sobre envejecimiento. Que es un tema con mucha mucha miga.

Nos leemos!