Microbios para comérselos

Estamos en la época de las infecciones alimentarias. Esa ensaladilla del chiringuito que más que decirte cómeme parecía que iba a comerte ella, ese ali-oli que parecía cantar…en fin, esas cosas. Pero aunque parezca mentira dados los malos ratos que nos hacen pasar esos bichitos (que en el caso de los virus ni de bichos puede hablarse porque sólo se reproducen y eso cualifica poco pa ser bicho, qué le vamos a hacer) según quién les haga el retrato pueden ser de lo más bellos, tanto que hasta dé ganas de comérselos. Eso sí, no lo hagáis si no tenéis ganas de pasar un mal rato. Avisados estáis.

Hasta vuestra abuela estaría envidiosa de vosotros si le enseñárais esta colección de tapetes inspirados en una serie de virus de lo más simpático, en orden de aparición: el del SIDA, el de la hepatitis B, el del herpes y el de la gripe. La serie se llama Doilies, que en inglés significa tapetes precisamente, aunque suena mucho mejor en ese idioma que en español, para que negarlo y la artista, que no pasó horas haciendo crochet como tu abuela sino que usó una máquina con patronaje computerizado se llama Laura Splan.

Virus de la Hepatitis B
Virus del SIDA
Virus de la gripe
Virus del herpes
E.Coli

Si lo de los tapetes no es lo tuyo igual te va más el rollito cristal…

¿Qué te parecería poner en tu estantería de cocina un monumento la bacteria E.Coli? Ese habitante de nuestros intestinos tan simpático -cuando es del serotipo malo O157:H7-  y que por cierto, es un pasajero habitual de nuestros intestinos y al que debemos agradecerle que evite que otras bacterias, estas sí indeseadas, se alojen con nosotros.

Aquí os traigo a otro de los invitados indeseados del verano, también retratado en 3D, la Salmonella, responsable de la mayoría de intoxicaciones alimentarias y que ya sabemos cómo acaban: con alguien atado a un lavabo, fiebre y retortijones. Acordaos de mí cuando os pongáis ciegos en el chiringuito. Sin maldad. Ni envidia. 😉

Salmonella

Hay más, mucho más en la web de este artista del vidrio, Luke Jerram, que se decidió a retratar virus de esta forma porque en la realidad los virus carecen de color y era preciso una representación que no alterara nuestra percepción de la realidad con falsos colores. Podría haber elegido cualquier otro de los muchos que pueblan su web para ilustrar de lo que hablamos pero he elegido al bacteriófago T4 porque es uno de mis favoritos de siempre, sobre todo porque me recuerda en parte a un robot y en parte a la representación de anticuerpo que salía en Érase una vez…la vida (todos aquellos menores de 30 años, olviden la referencia). Por cierto, este virus sólo infecta a bacterias así que nosotros estamos a salvo de esta cosita tan mona…quizá esa es otra razón por la que me gusta tanto ¿quién sabe?

Bacteriófago T4

La última nota como siempre es recomendar que paséis un rato descubriendo y saboreando las webs de estos dos artistas, geniales cada uno a su manera. Por cierto que ella no sólo hace tapetes, también pinta con sangre…y seguro que volvemos a traerla por aquí en alguna otra ocasión. Hasta entonces, ¡a disfrutar del verano!